La Fundación se plantea actuar en dos realidades geográficas, sociales y culturales diferenciadas. Por un lado, contempla los Países Catalanes como principal territorio de actuación y, por otro lado, dedica especial atención a países del continente Africano.
Los Países Catalanes trebajan principalmente con niños de Badalona Sur y en África con las comunidades de Ruli, Kigali y Kagenge en Rwanda.